Realizar un CV. puede no resultar tan sencillo como parece, no solo se trata de colocar nuestra información académica y profesional de manera mecánica, sino de estructurarla de manera estratégica para resaltar la información que mejor venda nuestro perfil profesional.

Existe diferentes formas de ordenar nuestros datos en el cv, por ello, aquí detallaremos algunos tipos de organización para que pueda elegir el que más se adapte a sus necesidades.

Clasificación cronológica:

Este método ordena la información de experiencia laboral desde la más antigua hasta la más reciente y suele ser el más utilizado, sin embargo no es muy conviene si su información es muy extensa y sus primeras experiencias laborales no son relevantes para el puesto al que está presentándose.

Currículum funcional o temático

Este tipo de CV es muy requerido por muchas empresas. Se caracteriza por distribuir la información por temas y hace énfasis en las funciones que has venido realizando en las organizaciones. De esta forma, permite proporcionar un conocimiento rápido de tu formación y experiencia en un ámbito determinado. La desventaja es que el CV funcional no te diferenciará de otros candidatos.

Currículum por logros:

La información que contiene este documento debe ser breve, con un encabezado corto, que vendría a ser un resumen de su perfil. Debe indicar qué ha estudiado, cuál es su situación actual, qué estudios ha realizado, las características más resaltantes y positivas de su personalidad, etcétera, y sobre todo lo que ha conseguido en función a los objetivos plateados en los puestos de trabajo que ha ocupado.

Ahora, échele un vistazo a su hoja de vida y evalúe cómo está estructurada su información.