El inicio de una nueva década llegó con una pandemia global, movimientos sociales y turbulencias a nivel económico y político que han desafiado la estabilidad de los sistemas económicos y sociales alrededor del mundo.

Esto llevó a un replanteamiento de los modelos de trabajo y de educación y ha generado un cuestionamiento frente a los hábitos de consumo, las formas de hacer negocios, los servicios de la salud, el poder de la tecnología y la importancia de la cultura.

Ante este panorama, el rol de las instituciones educativas – específicamente las universidades – es crucial, pues tienen a su cargo la gran responsabilidad de continuar profundizando las bases del conocimiento, de impulsar la innovación y de apoyar a los alumnos en el camino hacia el liderazgo.

En este contexto instituciones como la Facultad de Administración de la Universidad de los Andes han apoyado a sus alumnos y los han motivado a ser personas resilientes para sortear los obstáculos que vendrán en los días, meses y años futuros. Así como, brindarles las herramientas necesarias para tomar decisiones contundentes y determinantes en el marco del bienestar y la sostenibilidad económica, social y ambiental. Históricamente, esto se ha reflejado en los cargos y los caminos emprendidos por los egresados de la Facultad, quienes ocupan posiciones en primer y segundo nivel de las organizaciones más importantes del país y actualmente tienen bajo su responsabilidad cerca del 14% del Producto Interno Bruto (PIB) de Colombia.

Hoy cada vez más jóvenes buscan que su universidad sea un espacio donde además de aprender lo importante y esencial sobre la carrera, puedan crecer como personas. Según un estudio realizado por la Facultad de Administración de la Universidad de los Andes, para los estudiantes es fundamental escoger una institución en la que sientan que, más allá de ser excelentes profesionales, están siendo formados para actuar de acuerdo con los valores de solidaridad, integridad y libertad. De igual forma, se evidenció que los jóvenes valoran los aprendizajes que giran en torno al crecimiento en los diversos ámbitos de la vida, y los espacios donde los obstáculos se entienden como una oportunidad de mejora y donde la mayor inspiración llega de los logros compartidos.

Los jóvenes de hoy entienden el éxito profesional como la capacidad de ayudar a los demás, lo cual es una concepción distinta frente al pasado, y que va atada al hecho de que los estudiantes se ven como individuos innovadores y con iniciativa y no como objetos pasivos. Ante esta aspiración, aspectos como el reconocimiento de la Universidad, la excelencia académica y el personal docente, son los tres elementos más importantes para los jóvenes a la hora de escoger una institución educativa.

De acuerdo con Veneta Andonova, decana de la Facultad de Administración “nuestro ADN es la excelencia académica y somos una comunidad que desde su creación ha aspirado a transformar através de la excelencia. Nuestros profesores están comprometidos con proyectos de impacto para el país y con la generación de valor para las empresas y las comunidades. Nuestros estudiantes están cumpliendo sus sueños profesionales y desde todos los espacios de aprendizaje crecen su capacidad de liderazgo. Desde la Facultad siempre hemos trabajado y trabajaremos para formar a los líderes del país”.

Para reafirmar este compromiso e inspirar sus futuros estudiantes, la Facultad ha diseñado la nueva campaña Liderazgo para la vida, comentó la decana. El objetivo es seguir contribuyendo a que más estudiantes, en las diferentes etapas de la vida, puedan encontrar en la Facultad un espacio para innovar, aprender y obtener las herramientas necesarias para proyectar su vida y aportarle a sus familias, comunidades, empresas, organizaciones, y al país.