El proyecto hace parte del semillero de investigación escolar “EcoChatarreros”, en el que los estudiantes, guiados por Carlos René Ramírez, profesor de dicho plantel educativo y también docente de la Especialización y Maestría en Gerencia Social, inventaron y diseñaron lámparas con tarros plásticos, baterías dañadas de computadores portátiles, paneles solares y cordones de zapatos, logrando así la posibilidad de que estos artefactos, llamados “Luces de Paz”, pudieran cargarse con luz solar.

Desde la Facultad de Ciencias Empresariales de UNIMINUTO Bogotá - Presencial, afirman que la actual contingencia que se vive en el país motivó que la imaginación de estos menores incrementará su potencial de invención, logrando de esta manera la creación de este invento que lleva luz a familias de distintas zonas del territorio colombiano, donde no se cuenta con el servicio de energía eléctrica. “La pandemia del Covid-19 trajo grandes tristezas a nuestro país, pero también saco lo mejor de nosotros y fue la solidaridad, la empatía y la preocupación sobre cómo ayudar a los demás. “EcoChatarreros” busca usar las toneladas de residuos de aparatos eléctricos y electrónicos que se generan en la ciudad, para ayudar a los demás y proteger el medio ambiente. Con esta iniciativa escolar, para este año se tendrían 100 lámparas que sus niños creadores dicen que cambiaran vidas… así lo expresa el estudiante de noveno Esteban Lara - ¿cómo será la vida de otros niños sin luz?, ¿Cómo estudiarán?, ¿se va el sol y no pueden hacer nada?”.

Ahora ya son varias las personas, entre niños y adultos, los que se han beneficiado con este proyecto creado por estos jóvenes estudiantes, quienes con el apoyo del profesor René Ramírez, aplicaron las herramientas de mercadeo social, financiación de proyectos, y por medio de la ONG “Agencia Social”, han logrado los recursos para hacerlos llegar hasta las distintas regiones del país como Bahía Solano, Nuquí y próximamente llegará hasta la Alta Guajira.