“Esta red social está vinculada a la proyección del empleo o del desarrollo profesional. Es una plataforma en la que tienes la oportunidad de publicar tu perfil y que este sea visualizado por empleadores o por otras personas de tu misma cadena”, indicó Johana Mantilla, directora del Departamento de Mercadeo y Admisiones de la Universidad Central.

La doctora Mantilla hizo estas declaraciones a propósito de su participación como panelista en el Education Summit, evento en el que se reunieron marketers y directivos de la industria de la educación superior para conversar sobre el estado actual del sector y las posibilidades que ofrece el ecosistema digital para el branding y el performance para alcanzar las metas trazadas.

Durante la jornada se habló sobre la estadística de los diferentes medios en materia de conversión y el futuro de la educación, destacando cifras tan importantes como que, en los próximos 20 años, el 67 % de los estudiantes profesionales estarán cursando carreras que hoy no existen.

En su intervención, Mantilla se refirió a las ventajas y oportunidades de mejora que tiene la plataforma para las entidades de educación, y señaló que, desde la perspectiva del anunciante, los activos estratégicos de Linkedin son la segmentación y la veracidad de la información.

“Con la segmentación tenemos la oportunidad de llegar, por ejemplo, a personas con posgrado o específicamente personas con posgrado en economía y que trabajen en el sector público, o personas menores de 30 años que estén estudiando derecho, si es lo que necesito”.

Mantilla, encargada de gerenciar la utilidad en la plataforma, concluye que su experticia tiene que ver con la mezcla de medios que se realiza para lograr los resultados esperados como marca.

“Determinamos en cuáles redes sociales queremos estar, comprendiendo que esto será establecido dependiendo de los objetivos trazados”.

El aporte a los profesionales
En el artículo Qué es LinkedIn, para qué sirve y cómo funciona, Berto López compara la experiencia de usar LinkedIn con la confección de un curriculum vitae. “Te das de alta, creas tu cuenta y empiezas a rellenar tus datos profesionales que son básicamente los que pondrías en tu CV: titulaciones profesionales, educación, puesto de trabajo actual y puestos pasados, habilidades, publicaciones, etc.”.

De acuerdo con López, a partir de estos pasos previos, LinkedIn se encarga de explorar las relaciones del usuario dando a conocer datos como sitios de empleo en común con otros profesionales o incluso sugiriendo potenciales contactos de acuerdo con la experticia de cada uno.

“Tener tu sitio web profesional es un primer paso importante para crear y promocionar tu marca personal en internet”, asegura. Además, agrega que, de esta manera, se puede hablar del declive de las hojas de vida tradicionales ante este tipo de apuestas digitales.

De igual forma, es necesario tener en cuenta que estar presente en esta red requiere una constante actualización de nuestra información, al tiempo que se cuenta con una agenda de contactos que, a su vez, ponen sobre la mesa su formación profesional al día.

Por último, y como un plus de LinkedIn, las recomendaciones que otros usuarios pueden dar sobre un profesional aportan puntos, algo que no sucede con las referencias profesionales o personales que se incluyen en el CV. “Otra fórmula sencilla, práctica y muy útil de sumar puntos en tu currículum”, explica López.