“Dado que octubre es el mes de Halloween los estudiantes de octavo semestre de la Escuela de Comunicación Social y Periodismo de la Universidad de Manizales, lideraron la propuesta en la que los vestuarios de los presentadores, luces, cortinillas y el guión estuvieron enfocados en la producción cinematográfica, bajo la supervisión y apoyo del comité organizador del certamen”, explicó Augusto Ramírez López, profesor del programa de Comunicación Social y Periodismo.

En esta ocasión se inscribieron 58 trabajos de 14 universidades del país, en 6 categorías: ficción, documental, experimental, filminuto, trabajo de grado y  producto periodístico.

“La Institución que participó con más trabajos fue la Universidad del Norte de Barranquilla, seguida de las universidades del Quindío y Autónoma de Bucaramanga”, comentó Paula Andrea Jiménez Gálvez, profesora.

El acto de premiación se adelantó en el Auditorio Auxiliar de la Universidad de Manizales, el jueves 17 de octubre del 2019, en el que se dieron a conocer los nombres de los trabajos ganadores, elegidos por los jurados Raissa Rosas y Juan Mauricio Vélez, destacada profesional de las áreas audiovisuales y reconocido profesor de varias universidades del país, respectivamente.

Formación

Durante esta edición, que inició el martes 15 de octubre, se orientó durante tres días el taller Tecnologías de periodismo inmersivo: hacia la remediación de las tecnologías 360, dirigido por los profesores Mario Humberto Valencia y César Augusto Arias, del Departamento de Diseño de la Universidad de Caldas.

Premiados

La producción No hay tiempo para llorar, dirigida por Michael Stiven Pérez Pérez, de la Corporación Universitaria Unitec, de Bogotá, ganó ocho premios Césares en la Categoría Ficción: Dirección, Producción, Guión, Arte, Fotografía, Sonido y Montaje.

El director del cortometraje explicó que con esta historia, “se busca una representación en el que tres entes fundamentales tuvieran un conflicto y tuvieran un interés común. En el caso de esta producción intervienen tres actores de la sociedad los campesinos, las multinacionales y los grupos armados que disputan las tierras de una región colombiana. El cortometraje narra la historia de Lucila, una campesina de 31 años de edad, cuyo sustento depende del cultivo de las tierras, y se ve inmersa en un conflicto con una multinacional que tiene vínculos con los grupos armados, pero a pesar de las amenazas decide resistirse por el amor a sus tierras y a su hijo Pedro, de 8 años de edad”, narró Pérez Pérez.

Otras instituciones ganadoras fueron la Universidad del Norte de Barranquilla, con 6 premios, y la Corporación Universitaria Minuto de Dios de Bogotá con 5 reconocimientos.