El Programa de Doctorado en Ingeniería de la Escuela incorpora conocimientos en ingeniería, ciencias aplicadas y tecnología. Fue diseñado como respuesta a la necesidad urgente de los países en desarrollo de crear un ecosistema de investigación e innovación capaz de generar una economía basada en el conocimiento, mediante recursos humanos altamente capacitados y una rápida adopción tecnológica. Igualmente, reconoce la importancia de la investigación aplicada, creada en estrecha colaboración con la industria, como un mecanismo para impulsar desarrollos propios y acelerar el crecimiento económico.

Adicional a lo anterior, adopta una visión crítica y optimista sobre la investigación científica. Así, en el sentido planteado por Karl Popper (1963), el método científico no está basado en la inducción y la experimentación sino, en cambio, en las conjeturas y el criticismo a estas conjeturas. Así, cada idea o teoría se considera refutable y es trabajo del investigador dudar de las teorías y plantear métodos para refutarlas.