1.- Conocimientos interdisciplinarios

Tanto para la danza, como la actuación y la música, es necesario poder adquirir conocimientos de diversas disciplinas ligadas a la Historia, Literatura, entre otros, para poder realizar una adecuada interpretación. Asimismo, estas tres materias se complementan y colaboran entre sí, de manera que la formación de un artista tiende a ser amplia y variada.

2.- Interés por el estudio de la cultura nacional y mundial

Todo artista escénico busca inspiración por diferentes medios, por ello es importante que maneje un amplio bagaje cultural. Este conocimiento le servirá para entender cada contexto social y época en la que está ambientada la puesta en escena.

3.- Sensibilidad y criterio

En toda pieza artística se emite un mensaje que debe ser adecuadamente interpretado para evitar herir susceptibilidades u ofender al público. Por ello, es necesario que el artista desarrolle criterio y ética personal, especialmente cuando se acerca a realidades ajenas a la suya. 

4.- Liderazgo y trabajo en equipo

Para realizar un proyecto artístico, es necesario el apoyo de una gran cantidad de personas. De manera que, todo joven que aspire a ser parte del mundo de las artes escénicas, debe desarrollar habilidades para el trabajo en equipo y liderazgo.