Si de una entrevista laboral se trata, siempre debes tener alternativas que te permitan demostrar lo mejor de ti. Sin embargo, es necesario tener presentes algunas acciones corporales que puede dar una impresión inequívoca.
A continuación mencionamos algunos aspectos que son analizados a lo largo de la entrevista
• Evitar el contacto visual
Es considerado el peor error en una entrevista. Al evadir la mirada, puedes reflejar al entrevistador que eres una persona insegura, sin interés y sin capacidad de atención.
Procura mantener al menos por 10 segundos la mirada.
• Mala postura
La forma en que te sientes, puede decir mucho de ti al entrevistador. Si eres de los que se “desparrama” puedes verte como una persona arrogante y perezosa.
Lo ideal es sentirse cómodo, procurando mantener la espalda recta y los hombros atrás.
• Distracciones
“Juguetear” con algún objeto que tengas al alcance, es considerado como una de las prácticas de una persona con ansiedad; aspecto que la mayoría de las compañías no quieren para su equipo. Debido a que son personas que pueden llegar a tener bajos índices de productividad.
• No sonreír
Aunque a muchas personas le cuesta trabajo sonreír, ten presente que el hecho de no hacerlo revela tu nivel de “mal genio” o qué tan dispuesto estás para darte a conocer y la facilidad que tengas para entablar buenas relaciones laborales.
• Apuntar
Es un gesto muy agresivo y el que definitivamente pone barreras en la comunicación establecida entre las personas con las que estés interactuando.
Sin duda es un indicio de que eres una persona “mandona” que no está dispuesto a escuchar las opiniones de los demás.
• Apretón de manos
Muy fuerte o muy débil, cualquiera de las dos formas puede decir mucho más de lo que te imaginas. La posición de las manos es un factor clave y una señal de tu personalidad. Si saludas hacia abajo, indica arrogancia; al igual que ofrecer el antebrazo en vez de la mano.
Lo ideal es hacerlo, apuntado a la persona y con una fuerza justa por un máximo de 10 segundos.
• Posición de las manos y brazos
La posición en la que pongas tus brazos, puede mostrarte o no como una persona arrogante e incrédula y pone un freno de mano para que el entrevistador no quiera conocerte más.
En el caso de las manos, se analiza la confianza y la honestidad. Muestra si eres una persona sociable o si tienes algo que esconder.
Lo ideal es ponerlas sobre la mesa y moverlas sólo cuando quieras hablar de algo en particular.
• Sentirse Inquieto
Los nervios pueden jugarte una mala pasada, por lo que puedes empezar a mirar al techo, jugar con tu cabello o tal vez tocarte la cara pueden llegar a interpretarse como gestos de indiferencia ante la entrevista, así como distracción.