Dicha situación merece la misma atención y preparación que una entrevista de trabajo de tipo presencial, por este motivo, te presentamos cuatro aspectos que deberás tener en cuenta durante el proceso:

• Manejo y adecuación del espacio

Ser cuidadoso con cada detalle que haga parte de la ambientación es de gran relevancia, además de los aspectos técnicos, por ejemplo, la cámara (el encuadre), el sonido (si vas a utilizar algún micrófono). Se sugiere dejar como fondo una pared de color blanco, evitar el desorden o cualquier tipo de elemento que pueda dar una mala imagen tuya.

• Aspectos técnicos

Como lo hemos mencionado, asegurarse de la conexión a internet y el manejo de elementos electrónicos es un punto que puede jugar a tu favor o en contra, revisa con tiempo y realiza algunas pruebas para evitar fallas en el momento de la entrevista laboral.

En caso de presentarse alguna anomalía manifiesta su interés por el interlocutor y mantén una actitud profesional.

• Notas de apoyo

Para el momento de la entrevista, seguramente ya habrás investigado todo lo relacionado con la compañía, memorizar cada dato es una tarea agotadora y poco productiva, por este motivo, puedes tener un documento de apoyo, aprovechando el espacio, pégalo en un espacio que sea visible para ti y donde puedas ver lo detalles.

• Presentación personal

El hecho de que no sea una entrevista presencial, no quiere decir que puedas usar ropa casual; por el contrario demuestra lo importante que es para ti esta oportunidad, una manera de generar un contacto directo con la empresa es utilizar alguna prenda que represente un color institucional. Maneja la sobriedad.