Estos son considerados los peores métodos de estudio, según expertos de la Universidad de Kent y la Universidad de Harvard.
Existen muchos métodos de estudio tradicionales que muchos hemos empleado por años, sin embargo, muchos de ellos, han sido descartados por profesionales en la materia.
Según expertos de La Universidad de Kent y la Harvard University, estas prácticas pueden ser incluso contraproducentes. Afirman que ese no es el camino ni para obtener buenas notas ni para avanzar hacia un conocimiento de largo plazo.
También te puede interesar:
6 ideas para mejorar su CV durante las vacaciones
Prepárese para la universidad con estos cursos online gratuitos
Desde estos centros educativos indican qué métodos de estudio no son recomendables:
Aunque parezca sorprendente, estas técnicas no son recomendadas. Según se fundamente, cuando una persona estudia una materia con estos métodos o con una combinación de los mismos (la más frecuente es el subrayado con el resumen), empieza a sentir una gran familiaridad con el objeto de estudio que da paso a una ilusión: la de creer que domina un tema que, sin embargo, no está asentado.
Es decir que, no van más allá de lo leído en un tema, por lo tanto, no suelen profundizar o hacer un mayor desarrollo sobre el tema.
Ante ello, los especialistas siguieren las siguientes técnicas:
1. Apostar por la práctica: “Sustituir la relectura por la práctica, aunque sea de última hora, beneficiará a los estudiantes”. Es lo que afirman desde la Universidad de Kent Así, si optas por la repetición de los problemas que hiciste en clase o por actividades prácticas semejantes, aprenderás mejor y a más largo plazo. Afirman que así se logra conectar conocimiento y utilidad real.
2. Darse un respiro entre sesiones: Si eres de los que estudiaban una asignatura y seguía machacándola sin descanso, cometías un error. Los expertos recomiendan espaciar las sesiones de estudio de la misma materia casi hasta que empiece a caer en el olvido. En ese punto, el estudiante deberá esforzarse por recordar lo aprendido en un proceso con el que se fijan mucho mejor los conocimientos.
3. Combinar asignaturas: En sintonía con lo anterior, se recomienda no centrarse en una materia, sino combinar varias. De este modo, los estudiantes van más allá de la memorización para alcanzar niveles de aprendizaje superiores. Además, el espaciado y la mezcla de asignaturas hacen que un alumno sea capaz de diferenciar mejor los problemas y de encontrar su solución con más agilidad.
4. Afronta los retos: Otro falso mito es que cuanto más fácil es el contenido a estudiar, más sencillo es su aprendizaje. Frente a esto, desde Harvard instan a elevar el nivel y a poner al alumnado en ciertas dificultades para potenciar el esfuerzo. Con esto se logra un aprendizaje más potente y más facilidad para integrar conocimientos y para ponerlos en práctica.
Fuente: Educación Tres Punto Cero