Maneja el estrés 
Existen periodos en los que la carga laboral puede aumentar y en la que se necesita un mayor apoyo por parte de la familia para que entienda la situación. La actitud más acertada será tener una comunicación transparente con los miembros de la familia y buscar apoyo en ellos para poder reducir la sensación de estrés.

Crea límites 

Cuando estés pasando tiempo de calidad en casa, es importante que te desconectes de forma completa de cualquier problema que se haya tenido en el trabajo y viceversa. Si no lo haces tú mismo, todo podría salirse de control.

Mantén un orden

Define la cantidad de responsabilidades con las que debes cumplir durante el día y jerarquízalas para que puedas ser más efectivo con el cumplimiento de cada una. No olvides ser realista con la cantidad de trabajo que debes cumplir y no rendirte en el proceso.

Prioriza tus necesidades

No importa la cantidad de responsabilidades con las que debas cumplir en casa o el trabajo, es necesario que te alimentes de manera saludable y duermas lo suficiente para poder rendir en ambos espacios.

Recuerda que lo más importante es encontrar la manera de sentirte cómodo en ambos espacios. No es necesario hacer grandes cambios en tu estilo vida para lograr un mayor equilibrio entre tu vida laboral y personal.